La tierra abonada es una mezcla equilibrada y nutritiva, ideal para la renovación y nivelación de césped o para plantas que no requieren un sustrato demasiado liviano. Su composición aporta estructura, materia orgánica y una fertilidad moderada que mejora la calidad del suelo sin volverlo excesivamente suelto. Perfecta para canteros, macetas grandes, huertas y preparación de superficies verdes.
Tierra negra 41.66%
Resaca de río 8.33%
Estiércol liviano 25%
Humus de lombriz 8.33%
Cascarilla de arroz 16.66%
